La Campa de los Ingleses (Estadio San
Mamés)
14 de marzo de 2018
En esta ocasión el gol poético se metió
por toda la escuadra del Estadio de fútbol de San Mamés, en los locales del bar
La Campa de los Ingleses y en medio de un ambiente bullicioso y relajado, con
un público atento que supo seguir en silencio y con aplausos cada uno de los
poemas leídos o recitados. Estupendo nivel en la poesía variopinta mostrada, en
las diferentes edades de quienes accedieron a leer, recitar, ofrecer su música
o sus actuaciones y por supuesto, en la participación para elaborar el poema
colectivo de la noche, el cadáver esqueleto que llevó por título El Pan.
No sólo faltaba este alimento
fundamental al apartado gastronómico de los cadáveres esqueletos de Noches
Poéticas; sino que, con ello, quisimos rendir homenaje a la iniciativa de
Ediciones Venguerén (Madrid) que reunió en un mismo libro el quehacer de 36
tahonas panaderas y los poemas de 36 autores, entre los que figuramos Julián
Borao y Julio González Alonso, de Noches Poéticas. Un libro con mucha miga,
como la que dejaron en este pan que se coció en la velada del 14 de marzo con
la masa madre elaborada de los versos de las 43 personas que se decidieron a
tomar parte y de donde salió esta hogaza compartida en la lectura del final de
velada:
El pan
Pan con queso, sabe a beso,
¡qué rico huele!
¡qué rica miga tiene tu asunto!
Que a buen hambre no hay pan duro
por la mañana y la noche… tierno
te quiero
mano sobre mano un mundo nuevo.
Alimento que gusta a grandes
y a pequeños
arando con los dientes tu corteza;
pido pan y rosas para el camino
(¡qué malo estás, condenado!).
Hoy he comido pan y me he quedado
sin palabras,
sin pan no hay vida… ¡enriquece tu vida!
Con una tortilla en medio, manjar
de reyes;
pan y queso, sabor a beso. El pan,
como el amor, que nunca falte,
¡millones de kropotkins que ni siquiera
buscan conquistar el pan!
Yo quisiera ser pan, masa madre,
que a buen hambre no hay pan duro.
Me gusta mi Athletic tanto
como un buen txoripan
muslo por aquí, muslo por allá
y pan, pan, pan!
Donde hay miga hay alegría,
¡que complemente mi vida
como el pan mis comidas!
Dios le da pan a quien no tiene dientes,
al pan, pan, y al vino
vino,
la mejor guarnición para todas las
comidas.
No hay mejor pan que el pan-pan
de nuestros cuerpos,
eres mi camino de migas,
putada de tema para celiacos,
¡al pan, pan
y al poeta, poesía!
Mientras corre el tiempo, paseriforme,
me duele el pico,
germen de la vida como poesía,
la poesía que ha de ser consumida
por la gente,
Pan-Gea, continente de miga,
la miga es poesía, la corteza la prosa,
¡Pim, Pan, Pum!
Masa madre que llama a la vida,
ya se olía rico este pan en la hogaza;
compartir el pan en partir el cielo,
se merece, ¡ay!, el pan un panegírico
y si no como pan,
me muero.
La poesía es empujar a Dios
para que hable,
el pan negro que hoy nos incita
y el pan de tu boca, mi alimento
mejor.
NOCHES POÉTICAS
De la elaboración: Julio González Alonso
Imágenes de la velada:
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