jueves, 24 de octubre de 2024

CRÓNICA Y CADÁVER ESQUELETO DE LA VELADA DEL 23 DE OCTUBRE DE 2024 EN EL DAVINCI DE BILBAO

 


VOLVER

Velada del 23 de octubre de 2025 – NOCHES POÉTICAS en ESPACIO DAVINCI – BILBAO

Estrenar temporada es como estrenar libros, zapatos o un amor. Hay nervios, emoción, curiosidad; la misma que reunió al numeroso público asistente y participante en la velada de Noches Poéticas en la tarde y noche del 23 de octubre en el DAVINCI de Bilbao. Fue muy estimulante ver el local lleno, de gente y de versos y de música, la que pusieron con gran inspiración y acierto el dúo Gandarwa, venidos desde Vitoria para traernos –fundamentalmente- aires celtas en la flauta y la guitarra para acompañar una noche temática dedicada a la poesía irlandesa. El concurso “Caza El Gazapo” fue resuelto con el acierto del poema que no era irlandés, de los cuatro leídos, por nada menos que 18 personas. Se hizo el correspondiente sorteo y la ganadora eligió como premio uno de los libros de la colección de Noches Poéticas.  Y así, felices, nos hicimos la foto.


Andoni Mendia, miembro del equipo de N.P., estrenó libro e hizo la presentación con la colaboración de los amigos que le ayudaron en la selección de poemas y la organización de la obra que lleva por título Be Kind, publicada en la colección TaToo de la editorial Vitruvio.

Amigos de siempre y magníficos poetas y narrradores como Alberto Infante o Blamca Sarasua, desgranaron sus versos junto a jóvenes poetas que, acompañados por su profesora, nos regalaron las reflexiones y sentimientos de sus poemas con acierto y pasión. Noches Poéticas se revela, después de 14 años de andadura, como un espacio abierto a todas las edades donde la juventud es protagonista.

Con todo lo dicho es fácil adivinar el ambiente entrañable y la atmósfera mágica creada en la velada. A ello contribuyerón también, además de la música y los poemas leídos o recitados, las actuaciones del perfopoeta Manuel Vicente Cajón y la escritura colectiva del Cadáver Esqueleto de la velada. El tema, Volver, resultó sugerente y animó a más de 45 personas a escribir su verso para ensamblar en los huesos de este cadáver esqueleto y darle la vida de la poesía surrealista. Un poema extenso, lleno de acertadas imágenes, que fue leído y celebrado al final de la noche y que ahora podemos leer aquí.

VOLVER

El respeto consiste en el abrazo a uno mismo.
Se piensa, se siente… son las emociones y los gestos
lo que importan. El reflejo de una sonrisa
olvidada. Volver
a ser,
al mar con el azul que refleja el cielo
donde no quedará rastro de tus huellas.


Estoy aquí
y nada ni nadie me volverá a apartar,
no volveré a ser aire, sólo presencia. Volveré
a ser luz y sombra, el arroyo en el arrullo
de la palabra
regresando a pretéritos perfectos.

Llegaremos alguna vez. No
regreses… quédate ahora donde estás,
aquí brota el latido de mi corazón por ti.
Volver a tu corazón, vuelve
para quedarte
y aquí stoy otra vez
por ti, sólo por ti voy
a buscarte sin miedo
cuando es tarde.

Me giro, te veo, te recuerdo, nos recuerdo
y confundo mis huellas con las tuyas. Salir
de un sueño para volver a la rutina,
el bombeo desesperado por vivir
cuando todo parece que se termina y la historia
se vuelve a repetir.
Regreso a la rutina, al ruido, dejando atrás
sueños cumplidos.

Que la luz, la oscuridad y la verdad
siempre vuelven. El mundo
está necesitado de amor y empatía.
Regresar a cuando el tiempo no era resbaladizo.
Volar a casa,
volver a remar para llegar otra vez
y finalmente el nadar queda en nada
y los lujos no dejan de ser un crimen.


No regresa la guerra que nunca se va;
redescubrir en la garganta cárceles de algas,
los árboles prisioneros liberando sus rehenes
al vaivén del mar.

Calma, ajetreo, descanso, intensidad, nada
y todo,
hogar y un lugar hudidizo de plumas de avestruz.
Sin embargo,
la luz se desvanece del recuerdo,
aspira a domar las estrellas,
cualquier punto equidistante de una circunferencia
vacía, porque varias vecesse recorren los caminos.
¿A dónde se vuelve entonces?

Si crees que será fácil retomar la distancia,
mejor vuelve otro día.
Ayer te echamos mucho de menos, Alejandro;
saltamos y volvimos a saltar. Todo el día
saltando. Con el aroma de las algas en tu pelo
recuerdo, en verano, el tiempo que se detiene
y se alarga después en la memoria.


Con todas mis fuerzas deseo fallar.
De nuevo me encontraba en aquella espiral, pero
lo has dicho tú, el día del mal
aunque quede invisible, de más rosa, siempre se quedan
las raíces
y vuelven lúgubres, vuelan raudos los estíos, noche
de octubre
con calor, calor desasosegante
y noche para celebrar poemas de amor.

Cuando dejé de sentir miedo fue demasiado tarde
para regresar; el sueño era real
allí donde todo empezó. Donde
todo
acaba.




 

NOCHES POÉTICAS