viernes, 4 de mayo de 2012

El Nombre de La Sombra

A Julián Borao
El nombre de la sombra
se viste con espíritus del alba
y adjetivos de estrellas.

Los mundos de la alquimia
se calcinan con verbos del abismo
y los magnolios sueñan con pronombres
al tiempo que los sauces ahondan sus raíces.

Un cúmulo de aullidos, en la nostalgia apátrida,
entreteje la lluvia con artículos
y los adverbios saben que los cuerpos
cabalgan sobre noches de locura
por las preposiciones de la herida.

Conjunciones al borde del amor
se adornan con el néctar de la diosa.

Interjecciones de humo en sus cavernas
se adhieren a palabras,
donde el poeta irradia con sus sílabas
crepúsculos amados por el viento.


Ana Muela Sopeña